Una camioneta «estaquitas» le pasó encima. Su madre se encontraba vacunando niños cuando fue notificada.
Enrique Romero.
Palenque, Chiapas.
Un pequeño de escasos 4 años de edad falleció atropellado frente a la escuela primaria «Fray Matías de Córdoba» de esta ciudad cuando una camioneta tipo «estaquitas» le pasó encima este lunes por la mañana. Su madre, empleada del sector salud, se encontraba en un puesto de vacunación cuando fue notificada de la tragedia.
De acuerdo con las primeras investigaciones, alrededor de las 10:30 horas el conductor de una camioneta Nissan, color gris, tipo «estaquitas», Ricardo López Hernández, de unos 45 años de edad, conducía sobre el periférico sur y asegura que el niño, Francisco Alejandro Vásquez Hernández, se atravesó de improviso, sin tener tiempo para evitar impactarlo.
Sin embargo, el Ministerio Público que realizó el levantamiento del cadáver deberá investigar los hechos, pues resulta sospechoso que el conductor, al ocurrir el percance, trató de darse a la fuga, dejando al niño agonizando. No obstante, el conductor del taxi 152 del sitio Maya-Pakal, quien presenció los hechos, inició la persecución del irresponsable conductor y por radio alertó a sus compañeros del volante. Los taxistas lograron interceptarlo cuadras más adelante. El hombre al ver su unidad rodeada descendió y echó a correr, pero los taxistas lograron detenerlo y trasladarlo a la policía municipal, autoridad que lo puso a disposición de la Fiscalía Distrital.
El pequeño, quien vivía cerca de la primaria, fue trasladado por vecinos al Hospital Regional pues aún permanecía con vida. Sin embargo, la gravedad de las lesiones provocó que falleciera minutos después de ingresar al nosocomio, al parecer por estallamiento de vísceras, lo que confirmará la autopsia, realizada esa misma mañana en el Semefo.
La madre del niño, quien labora en el área de epidemiología de la Jurisdicción Sanitaria con sede en Palenque, fue notificada del accidente en el puesto de vacunación que atiende y al llegar al hospital recibió la noticia de que su hijito había fallecido, lo que le provocó una crisis nerviosa. Cabe señalar que muchos conductores no disminuyen su velocidad cuando pasan por algún centro escolar pese a que es una norma de tránsito hacerlo, sin que la autoridad la haga respetar.
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