Autor de «La Cabeza Maya», encontró en el arte precolombino su fuente de inspiración. «Chiapaneco de corazón».
La obra escultorica de David Morales, inspirada en la plástica maya.
Palenque, Chiapas.
Enrique Romero.
Nacido en Sonora (1949), David Morales Fimbres llega a Palenque a la edad de 10 años, cuando su familia, los Morales, deciden hacer de Chiapas su tierra de promisión. Los Morales, particularmente, Moisés y Carlos (padre de David) se sintieron poderosamente atraídos por los vestigios mayas, abundantes en Palenque, en una época donde los grandes descubrimientos empezaban aún.
Moisés Morales es a la fecha un prestigioso especialista de la cultura maya que supo contagiar su entusiasmo por lo maya a personajes como Merle Greene y Linda Schele, entre otros de los más notables mayistas de talla mundial.
Carlos, por su parte, más interesado en la plástica maya donde los dinteles, estelas, cetros y tronos lucen maravillas de la lapidaria maya de la región, inició la reproducción en piedra caliza -con las mismas técnicas de los mayas- de los intrigantes glifos y la mística iconografía que dejó esa interesante civilización, con lo que es uno de los más eminentes iniciadores, no solo de reproducciones fieles, sino de la técnica lapidaria en piedra caliza, que hoy los artesanos de la zona han hecho la artesanía distintiva de esta región.
La monumental Cabeza Maya, icono que representa a Palenque.
Es en este contexto, de selva, humedad, misterio y pasión familiar por lo maya, que los hijos de Carlos y Moisés crecen rodeados de investigadores, historiadores del arte precolombino y los primeros epigrafistas, todos ellos hoy unas celebridades.
Cabeza maya finamente tallada en alabastro, otra de sus obras.
De ahí que resulte hasta cierto punto natural que Alfonso Morales Cleaveland, hijo de Moisés, sea ahora un reputado arqueólogo y especialista en epigrafía, en tanto que David Morales Fimbres se haya convertido en un artista plástico que lo mismo ha realizado fieles réplicas de tableros y estelas del periodo clásico maya, como originales esculturas, algunas de tamaño monumental, que constituyen hoy iconos que identifican a ciudades como Tuxtla Gutiérrez y Palenque, como es el caso de la famosa «Cabeza Maya», la cual representa al gobernante palencano Pakal, monumento que recibe a los miles de visitantes que llegan a Palenque.
David Morales, desde joven mostró talento para el dibujo y la escultura, por ello, tanto su padre, como su tío y otros investigadores, le solicitaban sus habilidades para registrar los monumentos mayas que investigaban. Y si sus primeras obras fueron fieles réplicas del arte maya -la primer influencia que recibe en el mundo de la plástica, antes que el conocimiento de la plástica occidental, la cual le fue provista posteriormente por su padre-, la creatividad innata de David desembocó en la recreación del arte maya que lo rodeaba, en su propia concepción de personajes históricos, la interpretación libre de la iconografía maya y la recreación propia de la cosmogonía. Es así como pasa al terreno de la creación artística e intelectual que hoy lo distingue como el escultor por antonomasia de Palenque.
La Madre Chol, encargo de Juan Sabines padre.
Es en esta ciudad donde varias de sus obras escultóricas, realizadas con estuco -material usado por los antiguos mayas-, se encuentran: su primer esbozo de lo que sería la Cabeza Maya, se localiza ahora el La Cañada -zona turística de Palenque- en el hotel de su hermano Marco Antonio. El Palacio Municipal de Palenque luce en sus fachadas los medallones grabados en bajorrelieve que adornan el frontispicio de la sede del poder municipal. Uno representa al gobernante Pakal, en tanto que el otro muestra el escudo de Chiapas.
Por pedido del gobernador Manuel Velasco Suárez (1970-1976) en las postrimerías de su gobierno, el escultor realizó su obra emblemática, «La Cabeza Maya». El carismático Juan Sabines Gutiérrez le encomendó la creación de una escultura estilizada que representa a «La Madre Ch’ol», etnia predominante en la región, y posteriormente realizó la escultura de la madre de Pakal, la poderosa «Sac-Kuk» (Ave Resplandeciente), a la que recientes investigaciones identifican como «La Reina Roja», obra que se encuentra actualmente en el aeropuerto de Palenque.
Sac-Kuk, la madre de Pakal, recibe a los viajeros en el aeropuerto.
En la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, por encargo del gobernador Patrocinio González Blanco, David Morales realizó otra monumental cabeza de Pakal, más fiel a la de terracota encontrada en las ruinas, que a su recreación ubicada en la entrada de la ciudad. Esta escultura se ubica en la Plaza de las Instituciones, frente a la secretaría estatal de turismo.
Pero la obra de este artista de cultura leonardina, se encuentra también en el extranjero: en la ciudad de Gaingsville, Florida, existen en museos y parques temáticos reproducciones de bajo-relieves mayas realizadas por Morales Fimbres, como el medallón de la entronización de Pakal, el friso de El Esclavo y otras obras más que también aportan la plástica maya a otros museos de ciudades norteamericanas, además de obras de creación propia, como 3 jaguares , una serpiente y una escultura zoo-antropomorfa, realizadas por el escultor palencano en piedra caliza, las cuales se encuentran en la ciudad de Dallas, Texas, en los Estados Unidos.
Sus primeras obras escultóricas se encuentran en La Cañada.
Por su obra plástica, siempre fundamentada en la de los antiguos palencanos, por su aportación al arte escultórico de Palenque y Chiapas, del que es pionero, y por su amor a esta selvática zona del país, David Morales, quien se define como «chiapaneco de corazón», se ha ganado a pulso el ser considerado palencano y chiapaneco distinguido, no obstante que sus raíces familiares se encuentran en el norte del país.
diciembre 6, 2008
Categorías: Arqueológicas, Cultura, General, Palenque . . Autor: Noticias Palenque . Comments: 2 comentarios
Debe estar conectado para enviar un comentario.